Hace mucho tiempo en una
isla tropical había una tribu guaraní, dentro de esa tribu había una pareja que
estaban comprometidos, pero la chica, Julia, no quería casarse. Ellos tenían un
árbol espiritual que decían que era mágico. La bella chica una vez caminando
por la isla se encontró a un nuevo chico llamado Martín, al verse se
enamoraron. Ellos se encontraban a escondidas para que sus padres no los
vieran. Pero un día el padre de ella, mando a que la siguieran. El guardia los
encontró besándose y se lo dijo al padre de Julia y el padre de Julia mandó a matar a Martín. Julia fue a suplicarle
al árbol espiritual que ellos puedan estar juntos para siempre, el árbol les
lanzo un polvo que los convirtió en dos árboles muy altos llamados Pinos. La
tribu se sorprendió por los nuevos árboles y con el tiempo las personas
comenzaron a utilizar estos árboles en navidad para recordar el amor de esa
pareja.
Leyenda escrita por Juan
7° B
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